Si por algo se caracteriza el país más voluminoso de Oceanía es, sin duda alguna, por haberse convertido en la Rusia -donde los helicópteros aterrizan para preguntar direcciones- de los territorios anglófonos. ¿Crees que exagero? Agárrate, porque vas a flipar: un australiano ha vendido un testículo para comprar un 370Z. Te prometo que va completamente en serio y que todavía falta exactamente un mes para que llegue el Día de los Santos Inocentes. 

Sólo en Australia: una pick-up quemando rueda... sobre un remolque tirado por otra pick-up

¿Cuánto estarías dispuesto o dispuesta a pagar para poder conducir uno de los mejores deportivos que existen? Sin duda alguna el Nissan 370Z se ha convertido por méritos propios en uno de los reyes de la calidad-precio y por eso no somos pocos los petrolhead que cada día suspiramos mirando al infinito por no poder disfrutar de las rápidas reacciones de su bloque V6 con 3,7 litros de cilindrada y 328 CV. Ahora tú también quieres uno, ¿eh? Pues conseguirlo está mucho más cerca de lo que piensas. Pegado a ti, si eres hombre. 

Aunque te parezca totalmente increíble, un australiano ha vendido un testículo para comprar un 370Z. El izquierdo, concretamente. Según informa la cadena de radio Nova FM, un enfermo sin remedio auténtico fanático del deportivo nipón llevó hace tiempo un poco más lejos la expresión "costar un huevo"... dejando que un cirujano le extirpase uno de los suyos a cambio de 35.000 dólares, que es el precio que tiene por allí el hermano pequeño del GT-R 2017. Y por lo visto hay pruebas que lo evidencian: una aparición relativamente reciente de Mark Parisi -que es el nombre del artista- en el programa ‘The Doctors’ mostraba la obra llevada a cabo en tan delicada parte de su anatomía. Obviamente te ahorraré ser testigo de semejante espectáculo. 

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¿Qué opinas? ¿Habrías hecho algo así para conseguir el artefacto de tus sueños? Yo, por un 911 Carrera T, podría pensármelo... aunque no creo que fuera una buena idea: probablemente el equilibrio de pesos se fuera al garete. Un australiano ha vendido un testículo para comprar un 370Z. Y tú ahí, dejando que los tuyos -o los de tu pareja- se devalúen a lo tonto... ¡ay!