Juraj Mitro: "Priorizamos la deportividad sobre las distracciones digitales"
Hemos entrevistado a Juraj Mitro, jefe de diseño de la marca Praga. Un fabricante con un siglo de historia que volverá este año a las carreteras con su superdeportivo Praga Bohema.
Ya iba siendo hora de otra charla con una personalidad del diseño de coches. Y qué mejor ocasión que esta para conversar con Juraj Mitro, jefe de diseño de Praga. Justamente el año en el que la marca checa volverá a las calles con su nuevo hiperdeportivo de 710 CV: el Praga Bohema.
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Un hombre que, en gran medida, es el artífice del retorno de la marca a los circuitos con el Praga R1 y ahora, a las carreteras con un coche deportivo homologado y especialmente bello. Una edición limitada a 89 unidades y enfocada en el placer de conducir.
Entrevistamos a Juraj Mitro, jefe de diseño de Praga
Pregunta: ¿Cómo empezaste en el diseño de automóviles? ¿Te han gustado los coches desde que eras niño?
Respuesta: He estado dibujando coches desde que tengo memoria. Siempre he sentido fascinación por el movimiento mecánico y por las formas aerodinámicas y funcionales, así que inclinarme hacia el diseño de coches surgió como algo natural.
P: ¿Cómo definirías tu estilo de diseño? ¿Prefieres lo clásico o te inclinas más hacia diseños futuristas?
R: Existe belleza en el diseño de coches desde el automóvil de vapor, y espero que aún esté presente cuando los esquemas de transporte público reemplace a los coches tal como los conocemos. Sin embargo, creo que no es correcto etiquetar el diseño de automóviles como clásico o futurista.
Mira el Citroën DS Tiburón y el Hyundai N Vision 74, por ejemplo. La perspectiva cambia con el paso del tiempo. Así que dime, ¿es el Praga Bohema clásico o futurista? (Juraj se ríe...).
P: ¡Totalmente cierto! ¿Y cuáles son tus principales fuentes de inspiración al diseñar un vehículo?
R: Tengo una mentalidad técnica relativamente fuerte, por lo que mis diseños generalmente están guiados por este propósito. Ya sea si me concentro en una parte individual o en el diseño general, primero me centro en la funcionalidad y luego busco las proporciones. Y en eso, encuentro la mayor inspiración en el mundo natural, con sus diseños intrincados y eficiencias.
P: El Praga Bohema es algo diferente. En un mundo lleno de superdeportivos, como lo es actualmente, es difícil ver algo así. ¿Cuánto tiempo os llevó el proceso de diseño y cómo surgió la idea de crear este vehículo?
R: El viaje comenzó hace más de 12 años, cuando nos propusimos diseñar el Praga R1 como un coche de carreras propio del siglo XXI, centrándonos en un diseño ligero, la seguridad y la aerodinámica.
El R1 resultó ser un automóvil maravilloso para conducir en la pista y todos nos enamoramos inmediatamente de la posibilidad de hacer una versión de calle de ese concepto, y el Praga Bohema es el resultado.
Es una respuesta muy simplista, por supuesto. Los 12 años desde el concepto hasta el automóvil de producción fueron un esfuerzo centrado en empujar los límites del diseño y el rendimiento en cualquier automóvil de carretera. Particularmente en ligereza, carrocería, pruebas en túnel de viento y una atención meticulosa a los detalles.
P: El uso extensivo de materiales compuestos parece evidente en el Bohema. ¿Cómo ha sido trabajar con la fibra de carbono?
R: Los compuestos de carbono ofrecen una combinación de resistencia y flexibilidad que proporciona una libertad de diseño incomparable, y he estado trabajando con el material durante tanto tiempo que honestamente no recuerdo cómo era trabajar sin él.
En el Bohema, la libertad de construcción era absolutamente esencial para integrar sin problemas la diseño y la función. Por ejemplo, con mi diseño de muebles Mitro, puedo usar su resistencia para hacer una mesa de soporte única de más de cuatro metros de largo. Me encanta el material y cómo me permite ser creativo, así que creo que si no existiera... Tendría que inventarlo (Juraj se ríe).
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P: ¿Qué otros materiales de alta calidad has utilizado en el chasis, carrocería, etc.?
R: Esta es una pregunta complicada, imagino (Juraj se ríe). Todos los materiales que usamos son de alta calidad. Nos hemos fijado el objetivo más alto en términos de peso total, apuntando a que el Bohema sea el más ligero entre los superdeportivos.
Esto limita nuestra elección de materiales a solo los mejores en cuanto a rendimiento. El chasis monocasco, los paneles de carrocería y la mayoría de los componentes interiores están fabricados de compuestos de carbono.
El bastidor trasero es de acero cromado molibdeno, la carcasa de la caja de cambios y las ruedas son de magnesio, los discos de freno son carbonocerámicos y hay un uso extensivo del titanio, duraluminio e impresión 3D con estructuras internas aligeradas en todo el automóvil.
P: ¿Cuál ha sido el mayor desafío al diseñar y construir el superdeportivo?
R: Encerrar toda la mecánica en su carrocería. Por todos los medios. Nuestros objetivos aerodinámicos y de un peso ligero hicieron que el espacio disponible para todos los sistemas del automóvil fuera extremadamente escaso.
Básicamente, estábamos adaptando el ecosistema de un coche de carretera a un chasis de carreras. Y hacer eso mientras cumplimos con las expectativas de confort de los pasajeros en un coche homologado para calle fue el desafío más extraordinario. El resultado de encerrar todo eso bajo la carrocería es lo que, probablemente, nos enorgullece más en términos de excelencia en ingeniería.
P: ¿Qué opciones de personalización ofrece Praga a sus clientes?
R: Si bien las configuraciones estándar del Bohema encarnan el pináculo del rendimiento y el diseño, entendemos el deseo de personalización. Nuestras opciones de personalización se centran en el apartado estético.
Tipos de pintura, tratamientos de las superficies y opciones de materiales de tapicería con variaciones prácticamente ilimitadas. También estamos recibiendo solicitudes muy interesantes y únicas que realmente nos emocionan. Y cuando es posible, siempre encontramos una manera de llevarlas a cabo.
P: ¿Cuál es tu filosofía para el interior? Hemos visto que es una cabina seria, sin pantallas grandes, enfocada en la deportividad. ¿Por qué elegiste diseñarlo de esta manera?
R: La filosofía del diseño interior es un reflejo de nuestro compromiso con la pureza. Al priorizar la deportividad y la ergonomía sobre las distracciones digitales, creamos un habitáculo que no solo mejora la experiencia de conducción, sino que también mantiene al conductor conectado con la esencia de conducir.
Este enfoque para el interior subraya nuestra creencia en la integración de las formas [de diseño] y la funcionalidad, proporcionando a los clientes un entorno de conducción que es igualmente atractivo como intuitivo.
P: ¿Cuántos diseñadores trabajan actualmente en Praga en tu equipo?
R: No hay un número específico. Tenemos un equipo de desarrollo comparativamente pequeño y no falta trabajo para los diseñadores, ya que ideamos casi todos los componentes del Bohema internamente. Por lo tanto, considero a todos mis colegas ingenieros como co-diseñadores. Y no creo que hayamos utilizado un diseño de forma cuadrada en ningún componente del automóvil.
P: El resurgimiento de la marca es una gran noticia. Nos alegra ver otro Praga en la carretera con este carácter. ¿Crees que habrá más autos en el futuro o grandes proyectos?
R: Praga tiene una historia continua de producción en el sector desde hace 117 años. Su historia fue, en muchos aspectos, moldeada por los eventos políticos globales. Así que Praga ya no es el fabricante de automóviles más grande en la región de Europa Central.
Pero actualmente tenemos karts, coches de carreras, motos, presencia en el Dakar, división de aviación y un hiperdeportivo en nuestra línea de productos. Nuestra historia de más de un siglo en la industria automovilística es un testimonio de nuestro legado y compromiso con la excelencia, con la promesa de un futuro lleno de innovaciones.
P: Finalmente, una pregunta que siempre hago a todos los diseñadores... ¡Me gustaría que elijas tres coches favoritos: uno clásico, otro moderno y uno para los circuitos!
R: Bueno, esto es algo difícil de responder. Pero si solo puedo nombrar a tres coches, hablaría del Alfa Romeo 33 Stradale de 1967 como coche clásico, al Honda E como coche moderno y al Porsche 911 RSR de cualquier generación para la pista.