Estas son las averías más comunes en coches tras largos viajes

Radar simula avería

Si vas a realizar viajes largos, es muy recomendable que revises algunos puntos de la mecánica de tu vehículo antes y después del trayecto.

Los viajes largos son una prueba de fuego para el mantenimiento de los coches. De estos cuidados depende el no tener averías o incluso, no sufrir accidentes que pongan en riesgo nuestra vida y la de nuestros seres queridos. Y por ello, hoy te contamos algunas de las averías más comunes.

Además, también te explicamos si son realmente graves o incluso si podemos subsanarlas en el momento o de qué formas podemos solucionar el contratiempo. Aunque en la mayoría de ocasiones, tener el teléfono a mano para llamar a una grúa será lo más fácil.

No cabe decir que, por supuesto, entendemos que entra dentro de la normalidad revisar tanto los niveles de aceite como de anticongelante. Líquidos esenciales a los que podemos echar un vistazo en menos de un minuto y que, directamente, nos ahorran destrozar por completo un motor.

Alternador y batería

Las baterías convencionales podrían dar un giro con la implantación del grafeno.
Las baterías convencionales podrían dar un giro con la implantación del grafeno.

Seguro que has escuchado o tienes conocidos que sufrieron problemas del alternador en el viaje. Se trata de un componente que va unido al cigüeñal a través de una correa de servicio y que genera corriente eléctrica para los diferentes sistemas del vehículo.

Si se rompe, es probable que deje de funcionar el aire acondicionado, el sistema multimedia o incluso la dirección asistida. Ante estos síntomas, lo mejor es parar, ya que puede ser peligroso conducir sin algunos componentes cruciales del vehículo.

No hay un mantenimiento como tal para el alternador. Sin embargo, y como sucede con el motor de arranque, a veces un par de fuertes golpes con un mazo o martillo puede ponerlo en funcionamiento de nuevo o al menos, durante varios kilómetros. 

Y por supuesto, su avería suele ir acompañada de una descarga total de la batería, que sí podemos comprobar mediante los avisos del propio vehículo o con un polímetro. Si la medición de corriente está alrededor de los 13 V, no debería haber problemas. Si está muy por debajo... Podría darte un susto a la hora de arrancar o por la noche, con las luces encendidas.

Bomba de combustible e inyectores

Raíles e inyectores Bosch.
Raíles e inyectores Bosch.

Bosch

Una pérdida de potencia repentina o problemas de arranque pueden deberse a fallos con el sistema de inyección. En ocasiones, las bombas de combustible se averían por antigüedad y su sustitución es obligatoria para el funcionamiento del vehículo. Y si bien no tiene un mantenimiento específico, circular siempre con bajos niveles de gasolina o diésel puede forzarla y deteriorarla.

Algo que sucede también con los inyectores. Comúnmente con sistemas un tanto extraños como los inyectores bomba de algunos motores TDI del Grupo Volkswagen o en general, en cualquier vehículo. Conducir a un bajo régimen de revoluciones continuamente puede dañarlos, al igual que puede pasar con las bobinas en el caso de motores gasolina. ¡Dale a las revoluciones de vez en cuando!

Neumáticos

Neumáticos de invierno

Los neumáticos son la mayor fuente de problemas en viajes para todo tipo de coches o incluso motos. Y el principal motivo es su uso desmedido. Son el único componente que une un vehículo al suelo. Que estén en óptimas condiciones (lleva también cadenas de invierno por si acaso), con un buen dibujo y presiones, que no estén caducados o incluso cristalizados es crucial.

Los neumáticos tienen una vida útil que hay que vigilar y si están mucho tiempo parados, pueden llegar a mermar su capacidad de agarre. Además, siempre es bueno revisarlos tras un viaje para comprobar si hay elementos clavados como tornillos o mordeduras en la goma. A la larga y tras mucho uso, pueden llegar a pinchar o incluso explotar.