Stellantis pone el grito en el cielo sobre la imparable subida de precios en la venta de vehículos

Carlos Tavares, CEO de Stellantis

Gustavo López Sirvent

El CEO de la compañía, Carlos Tavares, cree que es un problema muy grave

Cuando desde uno de los grupos automovilísticos más importantes del mundo se pone el grito en el cielo sobre la continua subida de precios de los coches, algo no acaba de funcionar bien. El presidente ejecutivo de Stellantis, Carlos Tavares, ha expresado su preocupación por los crecientes precios de venta de vehículos nuevos.

El CEO portugués puso el acento en el mercado estadounidense. Allí, en octubre del año pasado, el precio promedio de un automóvil nuevo superó los 45.000 dólares (41.250 euros) por primera vez y esta cifra ha seguido aumentando, llegando a más de 47.000 (43.000 €) en diciembre. Además, más del 80 por ciento de los compradores de vehículos nuevos están pagando márgenes de beneficio de los concesionarios.

Mientras hablaba durante una llamada de Zoom con varias publicaciones, Tavares señaló su gran preocupación por la tendencia al alza de los precios de venta: “Estoy muy preocupado por el efecto de la asequibilidad”, indicó. El dirigente de Stellantis cree que ese problema sigue creciendo: “se está convirtiendo en un problema mucho mayor a medida que aumentan las presiones inflacionarias”.

Tavares explicó una serie de factores que han provocado que los precios de los automóviles nuevos aumenten tan rápidamente. Para empezar, la actual escasez de semiconductores continúa afectando a la industria automotriz y ha provocado recortes en la producción. 

Además, los costes de las materias primas están aumentando y se han incrementado aún más en las últimas semanas tras la guerra en Ucrania, en particular los precios del acero, el aluminio y el níquel.

Carlos Tavares

El jefe de Stellantis señaló que si bien la compañía tiene importantes planes para sus vehículos eléctricos, a corto y medio plazo sus modelos electrificados seguirán costando más que los coches equivalentes con motor de combustión interna.

Tavares reconoció que la empresa no puede trasladar estos aumentos a los consumidores y señaló que, si lo hiciera, “las clases medias no podrían comprar coches nuevos”. En cambio, la empresa italo-franco-estadounidense necesita encontrar nuevas formas de reducir costes.

Un área en la que Stellantis busca ahorrar dinero es a través del marketing y su sistema de distribución. Tavares dijo que su sistema de comercialización y distribución representa aproximadamente el 30% del precio de un vehículo nuevo. Agregó que su marca también deberá trabajar en torno a diferentes leyes de franquicia en Estados Unidos y los mercados extranjeros.

Stellantis dona un millón de euros a los refugiados ucranianos

A medida que la situación en Ucrania continúa empeorando, el grupo Stellantis, a través de su fundación, acaba de comprometerse a donar un millón de euros para ayudar en labores humanitarias con refugiados y civiles. También se está comprometiendo con todos los empleados afectados en la región. 

También aclararon cómo accederían a esa ayuda los desplazados, diciendo: "Con el apoyo del jefe de operaciones de la firma en Ucrania, Stellantis confiará en una ONG local para ayudar a los ucranianos a usar este fondo".

El CEO de la marca, Carlos Tavares, explicó la medida condenando la violencia: “Stellantis condena la violencia y la agresión y, en este momento de dolor sin precedentes, nuestra prioridad es la salud y la seguridad de nuestros empleados y familias ucranianos", indicó. 

 Setenta y uno de sus empleados tienen su sede en Ucrania y se ha confirmado que están a salvo por el momento. La marca dice que ha creado un equipo de soporte dedicado las 24 horas, que monitoreará la salud y la seguridad de esos empleados. Aun así, la compañía no se ha comprometido a suspender su negocio en Rusia, que representa unos 22,4 millones de dólares (20 millones de euros).