El sueño de conducir sin manos en España está cada vez más cerca de hacerse realidad. El coche autónomo sin conductor al volante, al más puro estilo de películas de Ridley Scott, era casi una quimera, pero la legislación para este tipo de vehículos parece que llegará a finales de este 2023, si bien se irá adaptando a los seis niveles de conducción.

No es Tesla, sino Ford, quien se ha erigido en el primer fabricante en España en recibir el visto bueno del Ministerio de Industria y la DGT para que llegue a las autopistas y autovías españolas la conducción sin manos con la vista en la carretera gracias a su sistema BlueCruise que funciona hasta 130 km/h.

Por ahora solo se puede equipar en los Ford Mustang Mach-E que reciban la actualización del 'model year' 2023.75 y que se van a vender a partir del 12 de octubre de 2023. 

Si optas por equipar tu coche con esta aplicación lo harás mediante una suscripción de 24,99 euros mensuales. También tienes la opción de probarlo durante 90 días de manera gratuita, siempre que sea dentro del primer año desde la compra de ese modelo.

Esta tecnología de la marca del óvalo es un sistema de conducción autónoma nivel 2 avanzado (o nivel 2.5), lo que significa que el conductor no puede desentenderse del manejo del coche por completo. Esto sí sucede, por ejemplo, con el Drive Pilot de Mercedes-Benz.

La cámara infrarroja situada en el cuadro de mandos  monitoriza la mirada y la posición de la cabeza del conductor. Su función es garantizar que los ojos de quien conduce estén siempre fijos en la carretera. 

Si cuando vas al volante apartas la mirada durante cinco segundos, recibirás una serie de alertas sonoras. Al poco, el Mach E empezará a dar pequeños frenados y, por último, el vehículo reduce la velocidad hasta 10 km/h.

España es el tercer país de Europa en recibir el visto bueno tras Reino Unido y Alemania, y la activación de este sistema está restringido a autopistas y autovías que tengan una separación física entre los dos sentidos. En Ford las denominan Blue Zones y suponen 28.500 kilómetros.

Los ingenieros de la marca, aun así, han restringido algunos tramos por considerarlos peligrosos. Por ejemplo, si una curva tiene un radio relativamente cerrado (unos 700 metros), tendrás que tomar el volante con las manos, aunque eso no significa que el coche no pueda hacerlo solo: es un método de prevención.

El funcionamiento es más o menos como el de un control de velocidad normal: el conductor coloca las manos en el volante y fija la mirada hacia la carretera. Luego, pulsa el botón del cruise control y, si es posible el piloto podrá retirar las manos de la dirección sin apartar los ojos de la vía por la que circule.

Con el coche en marcha, lo que notas es que el funcionamiento es el mismo que el del control de crucero adaptativo con centrado en el carril: los sensores vigilan las marcas de los carriles y el resto de vehículos, con lo que se puede controlar la dirección, la aceleración, el frenado y la posición del coche en dicho carril. 

En marcha con el BlueCruise: ¿merece la pena?

Hemos podido probar el sistema en un breve recorrido por los alrededores de Madrid. Si estás acostumbrado a un control de velocidad adaptativo, su funcionamiento no te va a sorprender: acelera, frena y mantiene el coche centrado en el carril (salvo que adelantes a alguien que se acerque demasiado).

Sí hay que reconocer que lo hace de manera muy natural y con sensación de control absoluto. A la hora de quitar las manos del volante, se hace extraño al principio, pero precisamente por la buena calidad de rodadura del Mach E (que Ford trajo de Alemania).

Tomas las curvas con serenidad y, cuando es necesario retomar el control, te avisa con señales leves y poco alarmantes, lo que me parece un acierto (¿has intentado mover algún Citroën dos centímetros al aparcar con la puerta abierta? Sabes a lo que me refiero).

Se puede colocar en modelos pasados... y llegará en el futuro a otros

Si tienes un Ford Mach E con el paquete de tecnología previo a ese modelo 2023.75, todos los sistemas ya los tienes instalados (incluyendo la cámara infrarroja física). 

Entonces, ¿puedes disfrutar de este sistema? No por ahora, aunque en Ford aseguran que a partir del año que viene lanzarán una actualización inalámbrica y gratuita para todos esos modelos.

En cuanto a otros modelos, también lo lleva el Ford F-150 Lightning (que hemos podido probar en España). Esta es la versión eléctrica del pick-up más vendido de EEUU, donde ya hay 225.000 modelos que han recorrido 160 millones de km sin incidentes.

Sin embargo, en Europa nos interesa más el nuevo Ford Explorer, el SUV eléctrico desarrollado junto a Volkswagen y en el que tantas esperanzas hay puestas.

Más adelante, el sistema BlueCruise se ampliará permitiendo el adelantamiento semiautomático, probablemente indicándolo con la palanca del intermitente, aunque en la marca no nos han querido/podido decir cuándo ocurrirá eso...