Durante un par de semanas he probado el KIA Ceed GT. El coche de combustión más agresivo de la marca surcoreana (el último, seguramente). Y como acostumbro a hacer, un vehículo que apunta a ser un compacto deportivo hay que conducirlo como mandan los cánones: al límite de sus posibilidades.

Prueba del Hyundai i20N: del WRC a tu garaje y lleno de diversión

He querido buscarle las cosquillas a este KIA en su hábitat natural. A la vez que me acordaba de mis sensaciones al volante de algunos de sus rivales. Todo ello para responder a la pregunta que os podríais hacer quiénes os gusta conducir: ¿Vale la pena o se queda en un mero intento de deportividad?

Un diseño exterior con poco carisma y un interior sobresaliente

El KIA Ceed GT es relativamente pequeño. Cuenta con unas medidas de 4.325 mm de largo, 1.800 mm de ancho y 1.442 mm de alto. En 2022 recibió un restyling que puso algo más de picante en sus líneas, aunque siendo sinceros... No tiene la personalidad del KIA Stinger.

Mi unidad es de un color azul metalizado con toques en rojo que vemos en el parachoques delantero, las taloneras o el difusor. Las ópticas LED tienen presencia (sobre todo las traseras, con efecto 3D) y encontramos muchas líneas y detalles afilados. Pero falta algo más dinámico. Es un aprobado que agrada a la vista, pero ya.

Al menos, sus llantas de 18 pulgadas multiradio con pinzas de freno en rojo dan algo de vida a los laterales. Pero amigos, la magia está en el interior. Y aquí puedo decir que no ha habido un solo KIA que me haya defraudado en el habitáculo.

Tenemos un volante deportivo con cuero perforado y costuras rojas. Misma dinámica que en los paneles de las puertas o en los asientos, que se combinan con una especie de tela de alcántara muy agradable. Ofrecen buena sujeción pero también, comodidad. Y en cuanto a tecnología, no va corto.

Una pantalla multimedia de 10,25 pulgadas con sistema de audio JBL y cuadro de instrumentos digital de 12,3 pulgadas que modifica su apariencia dependiendo de los modos de conducción (Normal y Sport). Cámara de marcha atrás y sensores delanteros y traseros. Y por supuesto, conexión Apple CarPlay y Android Auto, aunque por USB. En serio, que estamos en 2023...

Más allá de este fallo, KIA nos facilita librarnos de la odiosa asistencia de cambio de carril y del sistema start-stop con dos botones muy bien situados. Y también, la desactivación del ESC (Control de estabilidad) está a mano, a la izquierda del volante. Por si eres de sangre caliente.

Todos los controles de climatización son físicos y están bien organizados. Y tus acompañantes para la fila trasera de asientos (espero que gente no demasiado alta), serán felices al saber que cuentan también con asientos calefactables. Finalmente, destacar que tiene una capacidad de maletero de 395 litros ampliables hasta 1.291 litros. Más que solvente.

Una motorización que muerde 

Bajo el capó nos encontramos con el motor 1.6 T-GDi de 4 cilindros en línea turboalimentado. Un viejo conocido que me hace recordar a mis (felices) días con el primo de este KIA Ceed GT: el Hyundai i20N. Exactamente con 204 CV y 265 Nm de par máximo.

Aunque en esta ocasión, digo adiós a la caja de cambios manual y me toca pilotar la máquina con una caja de cambios automática de doble embrague y 7 velocidades. Envía toda la fuerza a las ruedas delanteras y en las gomas... Michelin Pilot Sport 4 en medidas 225/40/R18. Sensacional.

En esta prueba del KIA Ceed GT podría deciros que acelera de 0 a 100 km/h en 7,4 segundos y que alcanza 225 km/h de velocidad máxima. Y que el Hyundai i20N hace valer sus 200 kg menos de peso y su cambio manual para sacar 6,2 segundos y 230 km/h a esas marcas.

Sinceramente, no hay color entre ambos. Pero he de decir que el KIA Ceed no se queda lejos y, en cambio, gana muchísimo en confort. Quizá es un coche más equilibrado que te permite morder a tus rivales en pista o a amigos con más caballos en la montaña. Pero también hacer viajes con una media de 6,6 litros a los 100 kilómetros, mucha tranquilidad y un sistema de sonido sensacional.

En las curvas da seguridad. Sobre todo con los Michelin calientes. Se nota que tiene alma de bestia y que el escape quiere sonar más. Incluso con las válvulas abiertas en modo Sport, está demasiado restringido. Y aun así, suena bonito. Pero esa es la dinámica del coche.

Entras con seguridad en la curva y sales queriendo más. Quieres más sonido de escape. Quieres unos asientos más deportivos aunque sacrifiquen algo de confort. Es como ese burrito en el que pides salsa picante y al final, no pica tanto. Te gusta igual, pero te deja con ganas.

¿Vale la pena el KIA Ceed GT frente a sus rivales?

Te voy a responder con otra pregunta. ¿Eres un calentao' como yo? ¿De esos que prefieren sacrificar el confort de toda la semana para llegar al sábado y ser feliz en un tramo de montaña? Porque si es así, este Ceed GT te va a dejar frío comparado con otros.

Está disponible por un precio desde 33.269 euros y solo puedes personalizar el color exterior con 8 tonalidades diferentes. El resto permanece intocable. Ni tapicería ni llantas. Y tendrás un coche muy equilibrado en tu garaje, con mucha tecnología. Un compacto deportivo al que, si retuerces, te beberá 10,0 litros a los 100 kilómetros de gasolina.

En definitiva, le doy ese adjetivo de compacto deportivo porque se lo gana a pulso sobre el asfalto. Pero como en otros tantos de su segmento, no busca un público objetivo de jóvenes ávidos de velocidad, técnica y rendimiento en detrimento de la comodidad.

Para eso ya tenemos al i20N, el Toyota GR Yaris o el Volkswagen Polo GTI. Incluso en el mercado de segunda mano puedes encontrar algún Polo WRC Edition o los Renault Megane RS por precios muy solventes. Así que... ¿Eres de mucho picante o algo más tranquilo? Ahí está la cuestión.