El Volkswagen Golf apareció a mediados de los años 70 para convertirse en un icono y en la vara de medir durante muchos años de los modelos que aparecían en el mercado imitando su fórmula. 

Normal, puesto que se puede decir que fue el primer coche compacto moderno y el que inauguró un segmento que, casi 50 años después, sigue creciendo.

Por eso fue un coche muy importante para Volkswagen, y no solo en Europa, sino a nivel mundial: se exportó a medio mundo, y uno de esos mercados fue el de Norteamérica, donde llegó con el nombre de Caribe (México) y Rabbit (Estados Unidos y Canadá).

El Volkswagen Rabbit se vendió en Norteamérica entre 1975 y 1984 con bastante éxito. Tanto, que lograron alcanzar la cifra de 1,3 millones de unidades matriculadas, lo que lo ha convertido en uno de los modelos más exitosos en ese mercado (incluso se utilizó como taxi en alguna ciudad).

Y eso que no siempre gozó de buena salud: las primeras unidades se importaban directamente de Alemania, pero a finales de los años 70 se decidió que se fabricaría en Pennsylvania, de donde salía un Rabbit con faros y pilotos cuadrados, suspensión mucho más blanda y un interior de peor calidad.

Las ventas cayeron, por lo que a principios de los 80 se volvió a un set-up más firme, a un interior de mayor calidad y se decidió lanzar la versión GTI que, debido a que era obligatorio montar catalizador, se quedaba en apenas 90 CV.

Por eso es tan importante… y por eso llama tanto la atención que la cuenta oficial de X (o Twitter o como quieras llamarla) de Volkswagen lanzara un misterioso tuit que dice que la web está llena de gatitos, pero que ellos prefieren honrar a los conejos. Y una cuenta atrás: D -7.

Y claro, como nunca nadie da una puntada sin hilo en redes (y menos un gigante como Volkswagen), aparecen ideas de lo que se podría avecinar: desde un nuevo modelo (quizá la versión definitiva del nuevo Volkswagen ID.2) a versiones de esas que nos hacen suspirar, como el Golf GTI con el kit de 380 CV o el Golf R que está en pruebas finales.

Está claro que no será Volkswagen Golf eléctrico (en principio prevista para 2028), pero quizá sí el Golf 2024 (restyling) que ya está en camino. De este, lo más destacado es que llegan cambios en el desastroso software actual y una pantalla más grande y de mejor funcionamiento.

Incluso podría ser una versión especial como la que apareció al final de la vida del Volkswagen Golf VI, aunque en el último post aseguran que han estado en el taller para preparar un modelo muy especial:

A pesar de que para el 31 de agosto hay previsto el anuncio de un nuevo modelo, el “Rabbitgate” tendrá que esperar un poco más: hasta la celebración del Salón de Múnich.

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