Hemos tenido el placer de probar la versión mejorada del hatchback Clase A de cuarta generación de Mercedes, que se lanzó en 2018 y se renovó a finales de 2022. Ahora es el momento de que la versión AMG A45 entre en acción.

Los cambios de estilo son mínimos. En cambio, la marca de la estrella se ha centrado en las actualizaciones tecnológicas internas para mantener el automóvil en línea con lo que los compradores esperan en los últimos años.

Al igual que con otros AMG, el A45 viene en dos variantes: el A45 sencillo y el A45 S más sabroso. El último, con 33 CV adicionales, más kit estándar, ruedas más grandes (19 en lugar de 18), tubos de escape más grandes, el doble de difusor. aletas, frenos más grandes y modos de conducción variables.

¿Se conduce bien?

No es un bisturí de bordes finos, si estás buscando el tipo de experiencia de conducción refinada y agradable de un automóvil de rendimiento verdaderamente perfeccionado. Esto es más como una motosierra controlada por computadora, destrozando caminos con un efecto devastador. 

Aún así, es un arma formidable que está repleta hasta los bordes de un equipo de alta tecnología. El sistema toma información de todas las partes del vehículo: control de estabilidad, ángulo de dirección, aceleración y mucho más. Además, distribuye su potencia (típicamente 50:50) entre los ejes.

En la parte delantera, un diferencial de deslizamiento mecánico distribuye la potencia a ambos lados, pero en la parte trasera es completamente electrónico: un par de paquetes de embrague sofisticados pueden enviar el 100 por ciento a cualquiera de las ruedas. 

Tiene un efecto similar a la dirección en las cuatro ruedas, estrechando las esquinas y manteniendo el láser del automóvil enfocado a lo largo de la carretera.

También hay un modo Drift (disponible si maximizas cada configuración y pones el ESP en modo de suspensión) que limita perfectamente el torque al eje delantero siempre que apures la dirección y el acelerador.

¿Qué pasa con el subviraje?

No tienes por qué preocuparte por el morro: se mantiene en línea porque aunque el motor está por delante del eje, tiene ese diferencial de deslizamiento mecánico para mantener las cosas juntas. ¿Y la dirección de par? No hay tal cosa, afirma el A45.

El AMG aplica su potencia de manera muy limpia: todavía hay un poco de retraso en la parte inferior, pero si lo mantienes en el punto óptimo, el automóvil rinde almáximo. A partir de las 4.000 rpm, el A45 vuela, y cuanto más suben las revoluciones, más fuerte golpea, hasta el punto en que golpea el limitador de 7.200 rpm.

Sin embargo, realmente no tiene ningún problema para hacer frente al rendimiento del automóvil, lo que inevitablemente significa que termina queriendo más. Pero luego te das cuenta de lo rápido que estás viajando y tomas las riendas... Buen ruido, un fuerte silbido de aire que se mueve rápidamente en el extremo superior también. 

El ruido canalizado del motor tampoco es particularmente perceptible; la característica de suavizar el ego es muy sutil.

¿Cómo es el motor?

El motor turbo de 4 cilindros y 2.0 litros produce 421 CV y 500 Nm de par, un conjunto de números embriagadores. Eso significa que acelera de 0 a 100 km/h en 3,9 segundos y tiene una velocidad máxima de 270 km/h de un automóvil que pesa 1.680 kg. Todos los números son sobresalientes. 

Lo que no te dicen es que el motor es una cosa monstruosa, con gran parte de la urgencia de un motor eléctrico clínico pero que sigue parpadeando y silbando como debería hacerlo un motor de alto rendimiento. 

El propulsor tarda un momento en ponerse en marcha si las revoluciones son bajas, pero una vez que alcanza la velocidad canta, arranca las marchas y alcanza velocidades francamente escalofriantes antes de que te des cuenta de lo que está pasando. 

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Es difícil considerar que un humilde 4 cilindros sea muy especializado, pero se ha girado 180 grados para que la admisión esté en la parte delantera, el escape y el turbo único en la parte trasera, acortando útilmente las longitudes de las vías y bajando la altura del motor en la parte delantera, lo que permite una línea de capó más aerodinámica.

Ahora considera la acumulación de calor. El turbo se enfría con agua, aceite y aire, y este último se canaliza a través de una entrada detrás de la rejilla, debajo de la cubierta del motor y luego pasa por el escape y el turbo y sale por una apertura que se dejó intencionadamente en el piso.

Hay tres bombas de agua: accionadas eléctricamente para el intercooler y el bloque de cilindros, además de una bomba mecánica más robusta para la culata. Este último puede bombear 280 litros de agua por minuto, más del doble del flujo de un automóvil estándar. 

El intercooler tiene que bajar la temperatura de entrada de 200 grados a 50. Cuando no puede hacer frente, puede pedir ayuda al sistema de aire acondicionado de la cabina.

El bloque del motor está hecho a la medida de esta arquitectura, capaz de soportar presiones de combustión de 160 bar, básicamente tan resistente como un bloque diésel. 

Para sentir una aspiración más natural y darle una razón para aferrarse a cada marcha, el par máximo (500 Nm) ahora no llega hasta las 5.000 rpm, la entrega aumenta a través del rango medio, en lugar de saltar en el extremo inferior y luego simplemente sostener.

¿Cómo es por dentro?

El interior del A45 se ha mejorado con un poco de cuero cosido y algunos acentos con efecto de aluminio, pero aparte de los asientos deportivos, hay poco más que no obtenga el modelo estándar. El material de microfibra en el aro grueso del volante es un buen toque. 

También es un entorno muy complejo para estar, lo que probablemente no sea lo mejor para un automóvil que requiere toda su atención en movimiento.

¿Y las pantallas qué?

Este no es un problema específico de AMG, sino más bien de la gama más amplia de la Clase A. El tablero digital panorámico y el infoentretenimiento (dos pantallas de 10.25 pulgadas) ahora vienen de serie en todos los Clase A, y no se sienten muy bien integrados. 

Es como si lo hubieran cortado de un tablero normal y lo hubieran colocado en ángulo; no hay mucho estilo en el diseño y otros fabricantes de automóviles manejan este tipo de cosas mucho mejor.

Lo peor es que los controles son complicados y poco intuitivos de usar: puede extenderse a la pantalla táctil (no es muy bueno en movimiento) o usar los controles táctiles en el volante. Querrás pasar algún tiempo con el manual, porque no siempre es particularmente intuitivo.

Por ejemplo, no pudimos encontrar la manera de pasar a la siguiente pista de música sin tener que navegar interminablemente por los menús de la pantalla táctil, pero hay un botón en el volante para hacer que el escape suene más pesado. Quizás AMG no cree que necesites escuchar nada de tu música.

¿Cómo es el espacio?

Hay mucho espacio en la parte delantera y es fácil sentirse cómodo en los asientos deportivos ajustables eléctricamente. También tiene el beneficio de la practicidad del automóvil base, con algunos pequeños cubículos decentes y lugares para guardar cosas. 

La parte trasera del A45 no es un lugar particularmente indulgente para estar: los asientos son cómodos y hay suficiente espacio para las piernas si las personas en el frente no son demasiado altas, pero es difícil apretar los pies debajo del asiento en el frente. 

Sin embargo, para ser justos, la parte trasera de cualquier automóvil de alto rendimiento es un lugar miserable para estar. En el maletero tienes 370 litros de espacio con los asientos levantados, que aumenta a 1.210 litros con ellos abatidos. 

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¿Cuáles son sus rivales?

Se trata del extremo serio del espectro de los hatchbacks, por lo que el A45 S puede contar con el Audi RS3, el Honda Civic Type R y el VW Golf R entre sus principales rivales. Si lo deseas, también podríamos incluir al Hyundai i30N, Toyota Yaris GR y Ford Focus ST en la mezcla, aunque esos operan en una sección del mercado un poco más asequible.

¿Cuál es el veredicto?

El motor de 421 CV, el sistema 4WD, la rigidez de la carrocería, la suspensión, la electrónica que soporta todo, todo es muy impresionante y está muy bien integrado. Es un tipo de coche muy particular: un hatch grandilocuente, grande en velocidad y gestos extrovertidos, falto de delicadeza y adaptabilidad. Deja eso para cupés como el Porsche Cayman o el Alpine A110.

El A45 tiene un objetivo diferente: ir rápido y divertirse. Eso lo alinea precisamente con el Audi RS3, un automóvil que es menos talentoso y menos carismático. El A45 tiene un punto dulce bastante grande: se ve bien por dentro y por fuera, funciona discretamente cuando no le exiges mucho y se vuelve salvaje cuando lo exiges.