El Audi R8 es el superdeportivo estrella de la marca alemana. Un coche que nació en 2006 y que se basó en la arquitectura del Lamborghini Gallardo para actualmente, en su tercera generación, compartir gran parte de elementos con el Lamborghini Huracán.

En sus inicios contó con motorizaciones diferentes: un bloque FSI V8 atmosférico de 4,2 litros y un motor FSI V10 atmosférico de 5,2 litros. Muy pronto, este Audi tomó fama mundial por su manejo en la carretera, aclamado por leyendas de la Fórmula 1 y de Le Mans como Jacky Ickx.

Prueba del Audi R8 V10 Performance RWD: ¿El perfecto R8?

Además, sus aventuras en competición se han saldado con multitud de victorias del Audi R8 LMS dentro de la categoría GT3, que ahora posee en su alineación a grandes figuras del motorsport como Valentino Rossi y que ha triunfado en grandes citas mundiales, como en las 24 Horas de Nürburgring.

Con el tiempo, la gama se completó con versiones de tracción trasera junto a la icónica integral con tecnología Quattro, carrocería Spyder, opción Performance e incluso el Audi R8 e-tron totalmente eléctrico, que apenas duró dos años en producción y del cual vieron la luz menos de 100 unidades. 

Pese a esto, el bólido parece estancado. No por méritos propios, sino ante el avance incansable de sus rivales de segmento y categoría.

Lamborghini está manos a la obra con su reemplazo para el Huracán. ¿Y qué pasa con Audi?

La nueva generación de superdeportivos es prometedora, como lo es también la competencia entre las diferentes marcas. Fuera del Grupo Volkswagen, Maranello y Ferrari ofrecen nuevos modelos cada año con una identidad de marca envidiable.

Bentley avanza hacia la electrificación y sus últimos modelos con motor W12 biturbo, McLaren no para de crecer, Lotus también tiene la vista puesta en su nuevo Lotus Emira y en el futuro electrificado de la compañía...

Por otra parte, Lamborghini lanzará multitud de nuevos modelos de producción hasta 2030. No es ningún secreto que ya están trabajando en el reemplazo del actual Lamborghini Huracán y que llegará en 2024 con la idea de no compartir absolutamente nada con el Audi R8. Será un deportivo totalmente nuevo.

El Lamborghini Aventador tampoco se alargará demasiado en el tiempo, y no se descarta ver un sustituto o algún anuncio en 2023 en el que se confirme también que mantendrá una opción de motor V12 atmosférico, como ha sido la tradición de Sant'Agata Bolognese desde hace décadas.

A ello habrá que sumar los futuros SUV más allá del actual Lamborghini Urus y los formatos de híbridos enchufables y eléctricos, porque para 2030, la compañía italiana pretender usar esta tecnología en absolutamente todos sus coches.

El próximo Audi RS6 será híbrido enchufable

¿Y qué pasa con el Audi R8? Pues de momento, absolutamente nada. Según algunas informaciones que arrojó hace tiempo AutoBild, parece que en 2023 podría anunciarse una versión híbrida con una potencia de poco más de 700 CV.

La compañía alemana no ha confirmado oficialmente que tenga planes para continuar con el Audi R8 en el futuro. Un sistema PHEV sería incoherente de combinar junto al motor TSI V10 actual, y la mala incursión eléctrica del pasado podría volver a repetirse si no hay un giro completo en el diseño.

Mientras todas las marcas avanzan con sus modelos, prometiendo y presentando nuevos diseños, tomando las riendas de la electrificación o aferrándose a los grandes motores clásicos como es el caso de Pagani, el camino de Audi parece oscurecerse en el futuro de su deportivo estrella.

Falta por ver si con intención o porque de verdad, no hay nada que decir al respecto. Tocará esperar a 2023, con el deseo de todos los aficionados a esta clase de bólidos de que el Audi R8 no desaparezca y abandone el panorama actual por la puerta de atrás.