Mini 5 Puertas

En un mercado lleno de exigencias a veces hay que cometer pequeñas herejías. En este caso hablamos de añadir dos puertas más al mítico MINI. No ha quedado mal, de hecho, ha quedado bastante bien… así que es perdonable. La marca presentó en el Salón de Ginebra de 2014, en calidad de prototipo, la solución a poder tener un MINI, pero con una habitabilidad más generosa que la del pequeño hatchback. Llegaba así, poco después, al mercado la versión de cinco puertas, con una carrocería que se alarga hasta los cuatro metros de longitud. Es decir, 16 centímetros más que su hermano de tres puertas.

Puede parecer un alargamiento insustancial, pero este pequeño crecimiento se ha aprovechado muy bien en las plazas traseras, las cuales ahora son más holgadas debido al crecimiento de la batalla (en siete centímetros). El maletero también es mayor, 67 litros más en concreto, rozando los 280 litros de capacidad.

A pesar de la renovación y su salto a una talla mayor, el diseño del MINI no pierde su esencia. Destacan el frontal y los faros de nuevo diseño. La capacidad de configuración ha aumentado porque ahora hay más colores disponibles, además de poder pintar el techo y los retrovisores en otro color ¡sin coste adicional!

Derroche de personalidad

Siguiendo con la personalización, es posible también elegir franjas negras o blancas sobre el capó y el acabado 'Chrome Line'. Por su parte, el 'Mini Cooper S' se diferencia por el diseño alveolar de su parrilla, la entrada de aire adicional en el capó, las entradas que dirigen el flujo de aire hacia los frenos, integradas en las entradas de aire inferiores del faldón delantero, el diseño propio del faldón posterior, con salida central para los tubos terminales del sistema de escape, y la parrilla que incluye la letra 'S' con marco cromado. En su conjunto, el interior destaca por su habitabilidad optimizada: los asientos delanteros tienen mayor margen de regulación, y los traseros incluyen unas banquetas más profundas.

Motores para cualquier necesidad

Existen seis motorizaciones diferentes. Se reparten tres en gasolina y tres opciones diésel, todas pertenecientes a una nueva tecnología de desarrollo de motores. La más que racional gama mecánica disponible proporciona mayores niveles de diversión y eficiencia con un menor peso. En la reciente actualización para 2018, se han visto optimizados el propio bloque motor, pasando por la tecnología 'MINI TwinPower Turbo', la electrónica, la alimentación de aceite, la aerodinámica del conjunto y el sistema de refrigeración hasta los sistemas de escape.

Detalles como las cubiertas de motor, por ejemplo, están ahora realizadas en plástico reforzado con fibra de carbono (CFRP) lo que las hace también más ligeras.

Para el nuevo MINI con carrocería de cinco puertas se puede elegir entre seis variantes mecánicas diésel o gasolina. En el apartado gasolina, encontramos los siguientes propulsores:

- MINI One: disponibles con 75 CV o 102 CV, con unos consumos medios por debajo de los cinco litros cada cien kilómetros.

- MINI Cooper: disponible con 136 CV, una velocidad máxima de 207 km/h y un consumo medio en torno a 5,2 litros/100 km.

- MINI Cooper S: con 192 CV de potencia máxima es capaz de realizar el 0-100 km/h en 6,8 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 235 km/h.

Las opciones mecánicas diésel la protagonizan los siguientes propulsores:

- MINI One D: disponible con 95 CV y unos consumos ajustados de tan solo 3,9 litros/100 km.

- MINI Cooper D: proporciona una potencia máxima de 116 CV, con una velocidad máxima de 202 km/h y unos consumos medios por debajo de los cuatro litros.

- MINI Cooper SD: el propulsor más potente en este apartado ofrece 170 CV, una velocidad máxima de 223 km/h y una aceleración 0-100 km/h en 7,3 segundos. Sus consumos declarados se sitúan en torno a los 4,2 litros/100 km.

Mejoras en el apartado dinámico

Las mejoras dinámicas no solo se deben a estos nuevos motores, también son causa de numerosas modificaciones del chasis, una reducción de peso, aumento de la rigidez y a un nuevo reglaje de la amortiguación, entre otras cosas. Se ha mejorado también la dirección y los sistemas electrónicos que gobiernan la dinámica. Pero lo más destacable de todo esto es el selector de modos 'MINI Driving Modes', un sistema que varía el reglaje del coche en función del modo elegido. Respuesta del acelerador, dirección, velocidad del cambio, reglaje de la amortiguación, el sonido emitido e incluso la iluminación ambiental son los parámetros que se verán modificados según qué modo se seleccione.

En el apartado de equipamiento también se ha dado un salto en esta nueva generación. Destaca la inclusión de un nuevo sistema de indicación y mandos: ahora, el velocímetro y el cuentarrevoluciones, así como otros elementos que informan sobre datos de relevancia para la conducción, se encuentran en el cuadro de instrumentos situado sobre la barra de la dirección.

Por otro lado, el característico instrumento central, que opcionalmente puede incluir una pantalla de color de hasta 8,8 pulgadas, ofrece, entre otros, informaciones sobre el estado dinámico del coche y sobre la activación de numerosas funciones que puede activar el conductor. Estos datos se pueden controlar mediante el botón de control 'Mini Controller' que se encuentra en la consola central. Algunas de las informaciones se resaltan con un anillo luminoso de LED para que se perciban con mayor claridad.

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