El BMW E39 y otros coches que se lo pusieron muy difícil a sus sucesores

BMW Serie 5 E39 mejores
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Lo mejorcito de cada casa.

Hay coches que dejan huella. Para los aficionados y usuarios son buenas noticias, pero para las marcas es un auténtico problema, ya que renovarlos sin que pierdan su esencia creo que es complicadísimo. Muchas veces lo han intentado pero ya te adelanto que pocas lo han conseguido. A continuación dejo 7 coches que se lo pusieron muy difícil a sus sucesores. Tanto que bajo mi punto de vista los modelos nuevos se quedaron por detrás.

BMW Serie 5 E39

BMW Serie 5 E39

BMW vivió un momento glorioso en el último lustro del Siglo XX. Cerró un siglo complicado con una serie de coches que bajo mi punto de vista son de lo mejorcito de la marca. El BMW Serie 5 E39 o el BMW Serie 3 E46 son los mejores BMW de su tiempo y también son los mejores en sus respectivos modelos, a lo largo de la historia. Estéticamente impecables, con un interior de una calidad altísima y un chasis que estaba a años luz de la competencia.

Ferrari 458 Italia

Ferrari 458 Italia Spider

El Ferrari 458 Italia es la última Berlinetta Ferrari con motor atmosférico y para muchos es la mejor de la historia. El cambio estético respecto al F430 que sustituía fue absoluto e incluso hoy, una década después de su lanzamiento, se sigue viendo espectacular. Fue tan bueno que todavía no ha tenido un relevo, ya que tanto el 488 GTB como el F8 Tributo no son más que la evolución del mismo coche.

Mercedes Clase S W222

Mercedes-AMG S65 Final Edition

Mercedes también es una marca que ha vivido tiempos mejores. ¿Quién no echa de menos la calidad, robustez o fiabilidad de coches como el W201 o el W124? Ahora bien, dando un paso hacia adelante, creo que Mercedes alcanzó la gloria, al menos en el apartado estético, con el Mercedes Clase S W222. Súper elegante, con un interior precioso y toda la tecnología del mundo perfectamente integrada. El nuevo Mercedes Clase S lo va a tener casi imposible para superarlo.

Seat León Mk3

Seat León

Estoy convencido que el Seat León Mk3 es el mejor Seat de la historia, el coche que ha cambiado el rumbo de la marca española y la ha llevado hasta un nuevo nivel, no solo a nivel económico, sino también a nivel de imagen. Cuando salió, conquistó a todos con su diseño afilado y tecnológico (fue el primer compacto generalista en montar faros full LED), la calidad le ha dado la razón y sí: sustituirlo ha sido un marrón para Seat. ¡Dudo mucho que la cuarta generación del León sea tan importante como lo fue la tercera!

Porsche 911 991

Prueba del Porsche 911 Carrera T

Si alguien es experto en evolucionar un concepto es Porsche con su 911. Cada generación podría tener el problema que tenemos aquí: ¡parece imposible mejorar y siempre lo consiguen! Sin embargo, creo que el Porsche 911 991 ha rozado la perfección. Su diseño es minimalista y elegante, sin estridencias. Bajo el capó, fue la última generación de los Porsche Carrera en contar con motores atmosféricos. ¡Y las versiones deportivas han sido brutales! El 992 es más tecnológico, más grande, más pesado y creo que transmite un poco menos. ¿Más aburrido? Bueno, qué Dios me perdone por decir algo así. Pero sí.

Lamborghini Aventador

Lamborghini Aventador

Lamborghini es una marca que siempre ha sabido evolucionar muy bien. Sin embargo, creo que será casi imposible sustituir al Lamborghini Aventador con acierto. Es un coche que ha marcado una época en la marca y se ha convertido en un éxito abrumador en el segmento de los superdeportivos. Cuesta creerlo, pero ya hace 9 años que se lanzó al mercado. Su diseño sigue siendo espectacular y su V12 atmosférico una delicia. ¡Tendrán muy complicado sustituirlo!

Citroën DS

La historia del… Tiburón que cambió la vida de Citroën

Y para terminar, el paradigma de la NO evolución. El Citroën DS se adelantó 50 años a su tiempo y la mejor muestra de ello es que Citroën no ha podido mejorarlo desde entonces. Un coche que supuso una revolución estética y tecnológica, un coche que permitió a la firma francesa vivir de rentas durante décadas y que con el fin de la suspensión hidra-neumática pareció decir adiós definitivamente a esa evolución. Y sí, lo has acertado: el presente es peor que el pasado.