Los mejores deportivos franceses de la historia

Alpine A110.

Una decisión difícil...

Francia es uno de los países con un mayor volumen de producción de automóviles del mundo, y una de las naciones que ha visto nacer a marcas que han hecho historia. Renault, Bugatti, Citroën, Peugeot... Y junto a ellas, una amplia tradición en el mundo de las carreras, con grandes eventos en las 24 horas de Le Mans o el Tour de Francia Automovilístico.

Elegir a los mejores deportivos galos es una tarea difícil, pero recordar tiempos pasados siempre es dulce, y a algunos modelos no les faltan méritos: un diseño rompedor, victorias en el Campeonato del Mundo de Rallyes o una potencia desmedida. Así que, ¿Cuáles son los mejores coches deportivos franceses de la historia?

1. Alpine A110

Alpine A110 original y de segunda generación.
Alpine A110 original y de segunda generación.

Alpine

Alpine A110 o Berlinette, te sonarán ambos nombres. Fue un deportivo construido por la marca Alpine, sujeta al grupo Renault y que tanto está dando que hablar hoy en día en Fórmula 1 con Fernando Alonso, 'El Plan' y sus nuevas ediciones de este icónico vehículo.

El A110 se produjo entre 1961 y 1978, y se desarrolló utilizando la base y piezas de coches como el Renault Dauphine y el Renault 8. Además, su diseño se inspiró en parte en el Lotus Elan de Colin Chapman.

Así es el Alpine A522: la herramienta de Alonso y Ocon para hacer realidad El Plan

En su versión Alpine A110 1600 S SI de inyección, su motor R17 TS de 1,6 litros llegó a desarrollar 140 CV, sustituyendo a los sistema de doble carburador Weber anteriores. En rally, por otra parte, montó una unidad de potencia Renault-Gordini de 1,8 litros que le llevó a ganar grandes eventos como el Rally de Montecarlo.

Un coche realmente bello, de líneas suaves y aerodinámicas y con cuatro faros en el frontal que se convirtieron en sello de la marca. En 2017 nació la actual segunda generación, con una pintura similar y la misma configuración de faros, pero ahora con potencias cercanas a los 300 CV, un bajo peso (de poco más de 1.100 kg) y diversas versiones.

2. Renault 5 Turbo

Renault 5 Turbo 2.
Renault 5 Turbo 2.

El Renault 5 Turbo se produjo entre 1980 y 1986 con multitud de versiones de calle y competición, con el Renault 5 Maxi Turbo en el Grupo B como el mayor representante de la gama. Alpine influyó mucho en su desarrollo, que pretendió plantar cara a los éxitos de Lancia.

¡Un Renault 5 Turbo 2 con solo 7.835 kilómetros a la venta!

Su motor Cléon-Fonte de 1,4 litros turbo desarrolló 160 CV y 221 Nm de par máximo, que gracias al escaso peso del coche, hicieron a este Renault 5 alcanzar el 0 a 100 km/h en 7,7 segundos. Las unidades Renault 5 Turbo 2 y Renault 5 Maxiturbo de rally fueron aún más radicales, con motores de más de 300 CV y un peso de unos 900 kg.

Su potencia, rigidez en curva y facilidad de modificación hicieron de este coche una leyenda del mundo de la competición y los rallyes, con cuatro victorias en el Campeonato del Mundo.

3. Peugeot 205 Turbo

Peugeot 205 Turbo 16.
Peugeot 205 Turbo 16.

El Peugeot 205 nació prácticamente al mismo tiempo que el Renault 5 Turbo, pero su vida se extendió hasta 1999. Entre 1984 y 1985, Peugeot produjo la versión con el motor XU8-T de 4 cilindros en línea y 16 válvulas con intercooler, que generó 200 CV y 260 Nm de par máximo. Llegó, de hecho, a ser casi un segundo más rápido en el 0 a 100 km/h que el Renault 5 Turbo, con una marca de 6,8 segundos.

Los Peugeot 205 más especiales

Esto se debió a un peso aún más reducido que su homólogo, que no llegó a superar los 904 kg. El Peugeot 205 Turbo 16 fue el que participó en el Campeonato del Mundo de Rallyes con el Grupo B, alzándose con la victoria en 1985 y 1986, así como en el París-Dakar de 1987 y 1988.

4. Bugatti Veyron

Bugatti Veyron.
Bugatti Veyron.

La fábrica de Molsheim vio nacer de nuevo a un Bugatti en 2005, y esta vez se convertiría en uno de los coches más icónicos de todos los tiempos. Del Bugatti Veyron solo se produjeron 450 unidades para todo el mundo. 

En la versión inicial, su motor W16 tetra turbo de 8,0 litros alcanzó 1.001 CV y 1.250 Nm de par máximo, y en su última actualización Bugatti Veyron Super Sport, llegó a los 1.200 CV de potencia y 1.500 Nm de par máximo.

Pur Sang Bugatti Type 35: una recreación del coche de carreras más exitoso de la historia

En definitiva, un bólido que inauguró la edad moderna de Bugatti, sentó las bases del famoso motor W16 y del diseño de los actuales y futuros coches de la marca. En 2007 obtuvo el récord del coche más rápido del planeta, y en 2010 volvió a recuperar la corona con una marca de 431,072 km/h.

Su precio, como todos sabéis, no es barato: ronda los 1,6 millones de euros por unidad, y existen multitud de ediciones especiales como el Jean-Pierre Wimille, el Jean Bugatti o uno dedicado al hermano del fundador Ettore, Rembrandt Bugatti.