El nuevo Mazda Iconic SP apunta a ser el sucesor del Mazda RX-7. Un coche deportivo en formato de eléctrico con una peculiaridad: contará con un motor rotativo para regenerar su batería y alargar su autonomía. ¿Pero cabe la posibilidad de que sea híbrido en un futuro?

Estos son los prototipos de Mazda más espectaculares con motor rotativo

O en otras palabras, que funcione mediante el Wankel de manera principal. Y entonces sí, sería un sucesor de uno de los reyes de los coches japoneses. Así que nos adentramos en el mundo de la especulación responsable, porque hay indicios que podrían indicar que, al menos, el asunto está sobre la mesa.

Toyota, Lexus y Mazda unidas por la competición y un deportivo

¿Habéis visto el nuevo Toyota GR GT3? Sí, ese coche de carreras que están desarrollando junto a Lexus para competir en grandes eventos como Le Mans o campeonatos como el GT World Challenge. Y sorprendentemente, se parece muchísimo al antiguo Mazda RX-VISION que se presentó allá por 2015 para el Gran Turismo.

Un capó largo, una línea elegante, cabina retrasada en forma de gota de agua y con una amplia distancia entre ejes. ¿Otro coche parecido? Pues otro concept car: el Lexus Electrified Sport, sucesor del icónico Lexus LFA. Carrocerías con medidas muy similares. Extraño... A no ser que el chasis sea algo similar, por no decir un desarrollo conjunto.

Y algo muy interesante sobre este Lexus son los rumores de que además de una motorización 100% eléctrica, podría llegar a montar un motor V8 biturbo de alguna manera. Y esto es debido a que el cupo de electrificación de Toyota es extraordinariamente alto, con prácticamente la totalidad de su gama formada por híbridos, híbridos enchufables y también vehículos EV.

Así que se lo pueden permitir, desde luego. ¿Y quién tiene el mayor porcentaje de acciones de Mazda? Efectivamente, Toyota. Con un 5,053% (31.928.000 de acciones) para ser exactos. Con un acuerdo muy específico: permitir que ese cupo de electrificación del Grupo Toyota se aplique a Mazda.

Por esto, pese a ser una empresa realmente pequeña, siguen lanzando coches sin hibridación como el Mazda MX-5 o incluso grandes SUV híbridos con motores de 6 cilindros en línea de 3,0 litros alimentados por diésel. Algo relativamente incomprensible en los tiempos que corren.

Best Car Web, un portal japonés especializado en informaciones de insiders de la industria y filtraciones, comentó en enero de 2022 que un supuesto Mazda RX-9 (de haberse llamado así) iba a presentarse en 2023. Y dieron en el clavo, pese al cambio en líneas de diseño que no tienen por qué acabar siendo definitivas.

Y finalmente, durante los últimos años, Mazda ha estado inundando las oficinas de patentes japonesas y europeas con desarrollos de vehículos que cuentan con motores rotativos Wankel. Sin ir más lejos, a principios de 2022 con una patente que cuenta con un bloque de tres rotores y transmisión transaxle. Y todo parece apuntar en la dirección de, por lo menos, un híbrido de 48 V.

Y es que la motorización con tres rotores ha tomado fuerza durante los últimos dos años. Aparece en todas las patentes de la compañía con un eje de transmisión que lo une a las ruedas traseras e incluso dos motores eléctricos en las delanteras. ¿Híbrido enchufable? Podría ser, pero sin desvelar posibles ubicaciones de la batería.

Un asunto algo complicado, teniendo en cuenta que sería un vehículo... De motor central. Con el Wankel situado tras el eje delantero, justo a los pies del conductor y el copiloto, prácticamente. Y su chasis es sencillamente asombroso, aunque Gille G. Alfonsín (@GuilleAlfonsin en Twitter/X) os lo explica mejor en este hilo, que llega a las mismas conclusiones que un servidor y muchos más.

Entonces, ¿por qué presentar el Mazda Iconic SP como un eléctrico? Pues para no remover el avispero y calmar el asunto, igual que hizo Lexus con su nuevo LFA. Ecologismo, medio ambiente... Y tiempo habrá de soltar una esperadísima perla: un Wankel como motor principal.

¿Aseguro algo? Para nada. Solo hablo de algunos datos que están ahí, anunciados. Pero sin mucho ruido y que conducen a ciertos lugares con los que quizá, da algo de miedo soñar (por no llevarse una decepción). Y dicho esto, me retiro a sentarme al lado de mi maqueta y póster del victorioso de Le Mans más sensacional, el Mazda 787b. A soñar un poco más, que es gratis.