McLaren P1

El McLaren P1 es un superdeportivo perteneciente a la magnifica triada que forma él junto al LaFerrari y el Porsche 918 Sypder, los cuales son máximos rivales pertenecientes a una generación de superdeportitos sin igual. Equipa un motor eléctrico de 179CV y 260 Nm que McLaren ha incorporado junto al bloque V8 de 3,8 litros, doble turbo y 737CV. Las dos mecánicas, juntas, llegan a los 916CV, y cuando trabajan al unísono son imponentes: 2,8 segundos de 0 a 100 km/h, 6,8 para alcanzar los 200 km/h y, 16,5 segundos después, supera los 300 km/h. Las cifras son muy interesantes e importantes, pero importan mucho también las sensaciones, y McLaren sabe producirlas muy bien. Como híbrido enchufable que es, puede circular solo en modo eléctrico, con una autonomía de diez kilómetros, 160 km/h de velocidad máxima y 8,4 segundos para pasar de 0 a 100 km/h. Además, su consumo oficial circulando en modo híbrido es de 8,3 litros a los cien kilómetros, con unas emisiones de CO2 de tan solo 198 gramos. Pero no solo resulta descomunal el empuje que ofrece, sino cómo lo transmite a la carretera: se pega de tal manera al asfalto que este McLaren es un sueño hecho realidad para cualquier amante de la conducción. El McLaren P1 pasa a los anales de la historia del mundo del motor por ser uno de los coches más vanguardistas y rápidos de su época, la nuestra, gracias al extraordinario rendimiento de su sistema de propulsión híbrido y a su eficaz puesta a punto.

Para ahorrar peso, el McLaren P1 recurre a un diferencial abierto convencional y apuesta por emular la acción de un autoblocante utilizando el equipo de frenos. Y hace uso de este sistema controlado electrónicamente no solo a la hora de acelerar, también para ayudar a rotar el vehículo en curva, aplicando fuerza de frenada en la rueda interior para contribuir a la rotación. La tecnología fue estrenada con el primer McLaren de la nueva era, el McLaren MP4-12C, y desde el primer momento demostró ser una solución efectiva. Es cierto que somete a los frenos a un esfuerzo adicional, pero desde la marca afirman que además de ser igual o más efectivo, esta solución permite ahorrar unos cuantos kilogramos.

Desde el inicio del proyecto, los ingenieros de McLaren querían hacer un superdeportivo muy manejable y efectivo que fuera la referencia del segmento. Por ello, este coche tiene un peso en vacío de menos de tonelada y media. Y todo esto en un ambiente interior que no podría ser más sencillo y desprovisto de florituras. El McLaren P1 va equipado por completo en fibra de carbono. Allí donde se mire, está el material negro. Para redondear el conjunto, estrechos baquets bajo unas espectaculares puertas en alas de gaviota, con pequeñas ventanillas orientadas hacia arriba. El precio del mejor coche del mundo: más de un millón de euros. Sí, es una cifra muy elevada para que no todos los millonarios, futbolistas o estrellas fugaces del pop se puedan hacer con uno. Aparte de ser necesario superar un examen de conducir específico realizado por la propia marca, su producción quedó limitada a 375 ejemplares. No es ninguna sorpresa el precio para adquirir un McLaren P1 de 'segunda mano'. Desde el cese de producción, su precio no ha hecho más que aumentar. Los 375 ejemplares fabricados se vendieron rápidamente y para poder llegar a uno, se necesita realizar una oferta muy jugosa al propietario original. En subastas, las pujas arrancaban en un millón y medio, pero en pocos meses incluso superaron los dos millones de euros por una unidad.

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