¿Cuáles son los coches deportivos más icónicos con motor rotativo?

Mazda RX-7

No, no solo Mazda usó motores rotativos o planeo implementar los Wankel en sus coches. Por ello, repasamos los deportivos más icónicos con esta curiosa mecánica.

El motor rotativo, también llamado Wankel en honor a su creador, es un motor de combustión muy poco convencional. Su funcionamiento es radicalmente diferente al de un bloque de pistones, ya que usa un rotor o varios acoplados en línea para mover el cigüeñal.

Así esquivan el problema de las transferencias de movimiento en dos ejes y con un cubicaje mucho menos, son capaces de generar muchísima potencia. Mazda es la marca más conocida por su uso, que incluso les ha llevado a ganar Le Mans con el Mazda 787b.

Leyendas de Le Mans #1: Mazda 787b, el único vencedor con motor rotativo

Pero hay otros coches deportivos, además de los japoneses, que también los utilizaron. Por ello, te traemos una lista con los coches más icónicos con motor rotativo (fuera de la competición). Dos de ellos en formato de concept cars, porque nunca salieron de fábrica...

Mazda RX-7

Mazda RX-7 FD3S en Daikoku.
Mazda RX-7 FD3S en Daikoku.

Si empezamos hablando de un deportivo icónico, no puede faltar el JDM como primero de la lista. El Mazda RX-7 es ya todo un clásico muy cotizado que en su versión biturbo generó 280 CV de potencia. Aunque es capaz de producir mucho más, desde luego. Un diseño espectacular, elegante y con un sonido atronador a partir de las 6.500 rpm.

Mercedes-Benz C111

Prueba del Mercedes C111

El Mercedes-Benz C111 fue un prototipo de superdeportivo sencillamente espectacular. Todo un giro en la estrategia de la marca que apareció en 1969 y evolucionó poco después hasta alcanzar 370 CV de potencia gracias a un motor de 4 rotores. Gracias a su aerodinámica, podía superar los 300 km/h, aunque desafortunadamente, nunca llegó a producción.

Chevrolet Aerovette

Chevrolet Aerovette.
Chevrolet Aerovette.

¿Qué pasa si cogemos un Chevrolet Corvette y le colocamos un motor rotativo? Que se convierte en el Aerovette, un bólido veloz y aerobático (si pillas la referencia eres de los nuestros). Una potencia de 435 CV para el sucesor del Corvette C3 y con un peso de solo 1.180 kg. Aunque la crisis del petróleo de la década de 1970 dejaron el proyecto en nada...